Fabricar Fuego
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El encendido por fuego óptico es uno de los métodos alternativos de encendido de fuego más fáciles. Este método requiere que se concentre la luz solar intensa a través de una lente transparente o con un espejo curvo (como la copa reflejante de las lámparas).
Una lupa está formada por una pieza de vidrio o plástico transparente cuyas caras tienen forma curva hacia fuera, es decir, es más gruesa en el centro que en los bordes. Esta pieza se llama lente convergente porque cuando los rayos de luz inciden sobre una de sus caras de forma que son paralelos al eje óptico, la atraviesan y son desviados hacia un mismo punto situado al otro lado de la lente conocido como Foco.
Los rayos de luz se juntan en el foco, estos rayos son captados por toda la superficie de la lupa, entre más grande sea la lupa más rayos solares serán captados los cuales se concentrarán en un único punto. Como consecuencia, en esa zona se produce un aumento de temperatura.
Las moléculas de cualquier material absorben la luz del sol y la usan para incrementar su energía cinética (las moléculas vibrarán con mayor intensidad). La temperatura de un cuerpo es una medida de cuanto se mueven estas moléculas, mientras más se muevan mayor es su temperatura.
Pedernal y eslabón
El principio de este método se basa en la interacción de dos materiales diferentes por fricción. El acero se golpea contra el borde afilado de una piedra dura que genera chispas a medida que la roca desprende pequeños trozos de acero caliente.
Para que el pedernal tenga éxito, debe usar yesca seca muy fina. Las chispas creadas por la fricción del pedernal son de corta duración y deben caer sobre un material que capturará y retendrá las pequeña chispas.
La desventaja de este método es que el acero es difícil de encontrar en la naturaleza, ya que necesitas dos elementos para iniciar este tipo de fuego: pedernal y una pieza de acero.
2. Con el acero o la navaja frotaremos a lo largo del pedernal. El ángulo que debe tener el acero y el pedernal con respecto a nosotros no debe de pasar de los 90°. Entre más pequeño sea este ángulo, mayor fuerza se podrá aplicar para que se genere la fricción necesaria y se emitan chispas.
Un taladro de arco es un tipo de herramienta manual simple, que consiste en una varilla o torno (el husillo o eje del taladro) que se coloca en un movimiento giratorio rápido por medio de una cuerda enrollada alrededor, mantenida tensa por un arco que se empuja hacia atrás y adelante con una mano.
Esta herramienta de origen prehistórico se ha utilizado tanto como taladro, para hacer agujeros en materiales sólidos como madera, piedra, hueso o dientes, como como taladro para iniciar un fuego.
El taladro ofrece un método antiguo para encender fuego sin fósforos o encendedor, un método que aplica fricción para generar calor. El calor finalmente produce una brasa en el aserrín carbonizado. La brasa es pequeña, más pequeña que la cabeza de un cigarrillo, y frágil.
Una vez que se ha formado la brasa, se coloca cuidadosamente en un paquete de yesca. Una vez que la brasa está en el manojo de yesca, se nutre y se manipula soplando cuidadosamente hasta que se convierte en llama.
El torno (husillo), tallada para reducir la fricción en un extremo y maximizarla en el otro, se mantiene en un orificio en la madera base (la solera o el "tablero de fuego").
La cuerda del arco está envuelta una vez alrededor de la broca, de modo que quede lo suficientemente apretada como para no resbalar durante la operación.
La posición habitual que asume una persona mientras opera el taladro de arco es la siguiente:
La rodilla derecha se coloca en el suelo mientras que con la otra pierna pisaremos el tablero de fuego para que este no se mueva.
Con la mano izquierda utilizaremos un soporte, este puede ser cualquier material que tenga una hendidura en el centro donde pueda girar nuestro torno y que no lastime al momento de ejercer presión sobre el, lo más habitual es conseguir una roca e irla esculpiendo hasta tener la forma ideal.
Empezaremos a presionar el torno mientras que con la mano contraria haremos que gire gracias a la cuerda envuelta en él, tomando el arco empezaremos a hacer movimientos rápidos y repetitivos.
El calor de la fricción entre la tabla y el torno crea carbón que cae por la muesca en forma de "v". Esta muesca se hace con anticipación y permite que el carbon caiga a la yesca, esta forma es la más común pero se pueden usar otros métodos para crear una cavidad que contenga el polvo mientras se enciende.
Tanto la tabla de encendido como el torno pueden construirse con madera semiblanda, seca y no resinosa, y funcionan mejor cuando ambas están hechas de la misma pieza de madera; sin embargo, lo más recomensable es frotar madera blanda contra madera dura.
En cualquier sistema de fricción de madera, si obtenemos un polvillo negro,como de carbón, habremos acertado con la madera adecuada, en cambio, si obtenemos un polvo basto y arenoso, desechémosla y busquemos otra.
El factor más importante es la cantidad de humedad de la madera, la cual debe ser suficientemente baja para encenderse, ya que una madera húmeda no funcionará.
Este método de fuego primitivo utiliza una especie de bambú que tiene una concentración muy alta de sílice en las superficies exteriores del culmo.
Las chispas que salen encienden el combustible
Poco a poco caerá carbon a la yesca, así que procura no tener la madera alejada de la yesca para que el carbón encendido pueda caer sin apagarse.
- Podemos emplear una batería para hacer chispas uniendo los cables de ambos polos.
- También, en teoría, es posible fabricar una lente con un pedazo de hielo que labraremos con el cuchillo y terminaremos dando forma con las concavidades de las manos. Aunque si el frío es intenso el riesgo de congelación de nuestras manos puede ser demasiado alto.
- También es posible usar un objeto cóncavo (el fondo de una botella, por ejemplo) para hacer la lente, vertiendo agua sobre él y dejando que se congele. Si hacemos dos, podemos pegarlos con un poco de agua que, si el frío es intenso, se congelará enseguida.
- En ocasiones, echar unas gotas de gasolina o alcohol sobre la yesca puede facilitar la inflamación, pero no la empapes completamente. Si usas gasolina u otro combustible en un recipiente para calentarte, ten en cuenta que existe un riesgo potencial de accidente. Nunca añadas más combustible hasta que la llama se haya apagado y el recipiente se enfríe.