Hacha
Un hacha es un implemento que se ha utilizado durante milenios para dar forma, partir y cortar madera. El hacha tiene muchas formas y usos especializados, pero generalmente consiste en una cabeza de hacha con mango.
El hacha es un ejemplo de máquina simple, ya que es un tipo de cuña o plano inclinado doble. Esto reduce el esfuerzo que necesita para partir la madera en dos partes debido a la concentración de presión en la hoja.
El mango del hacha también actúa como una palanca que permite al usuario aumentar la fuerza en el filo; si utilizamos la longitud completa del mango generamos una acción llamada asfixia del hacha.
Las partes principales del hacha son las siguientes:
2.- Hoja, alma o cuerpo:que es en sí la que corta, tiene una forma de cuña gruesa hacia atrás y aguzándose (pero a la vez haciéndose más ancha) hacia adelante, termina en el filo.
3.- Filo: es la parte cortante, extremo de la hoja, esta parte es la que se introduce primero en la madera por efecto del peso de la cabeza del hacha.
4.- Ojo: un hueco cilíndrico que atraviesa la cabeza para que pueda unirse al mango.
5.- Cuña: que es un trozo generalmente de madera que se introduce en una ranura en el extremo del mango opuesto a la uña (por el ojo).
6.- Mango: permite sujetar y manipular el hacha.
7.- Hombro: la parte posterior del mango inmediatamente junto a la cabeza.
8.- Empuñadura: la parte inferior del mango. En las hachas con mango de metal (pequeñas hachas de mano) se acostumbra que esté recubierto de hule.
9.- Uña: es el extremo de la empuñadura (y por consiguiente, del mango).
Características a considerar:
El peso de la cabeza del hacha afectará su uso. Si es demasiado pesado, ganará fuerza pero perderá precisión, mientras que si es demasiado ligero, no cortará muy profundo.
El tamaño ideal del mango de un hacha es un tema muy debatido. En el caso de un hacha de tala, un mango más largo dará mayor oscilación y más palanca, pero un mango más corto dará como resultado una mejor precisión. La longitud estándar de un hacha de tala de tamaño completo es de 90 cm, pero esta debería ser la longitud máxima que la mayoría de los usuarios deberían considerar. Una persona que mida 1.80 de altura sería mejor con un mango que mida alrededor de 80 cm, ya que esto ofrecerá un buen equilibrio entre precisión y fuerza.
Tamaños:
Un hacha de tamaño pequeño es aquella que tiene un mango de entre 25 y 40 centimetros de largo, es una herramienta de una mano. El peso total es ligero, lo que los hace ideales para llevar. Son fantásticos para acampar, hacer senderismo, etc.
Un hacha de tamaño mediano varían en tamaños de 45 a 66 centimetros de largo. Ya no son un hacha pequeña porque hay mucho espacio para las dos manos, además de que son mas pesadas y ocupan más espacio, no todos están dispuestos a llevar una de estas para una caminata. Un hacha de tamaño mediano es ideal para una granja o cabaña. No necesitas ser un gigante para empuñar una y puedes talar fácilmente un árbol con una de ellas. Son excelentes para partir madera, quitar ramas de árboles, partir leña y más.
Un hacha de tamaño grande es cualquier cosa de más de 71 centimetros de largo. Cuanto mayor sea la longitud del hacha, más fuerza podrá generar al dar un golpe. Sin embargo, no exagere con esto. Unas pocos centimetros no harán una gran diferencia en su capacidad para cortar madera. Lo que es más importante es su seguridad y lo cómodo que se siente mientras la balancea.
Seguridad:
Debemos de tener unas reglas de seguridad en cuanto nos dispongamos a utilizar un hacha, recordemos que es una herramienta que puede ser peligrosa si no se usa correctamente, por eso debemos tener demasiada atención cuando cortemos algo, deberemos verificar que cuando alguien esté usando un hacha los demás se encuentren alejados.
Mantengamos el hacha seca para evitar su oxidación y no olvidemos mantenerla afilada, un hacha debe ser una herramienta afilada y debemos tenerle miedo cuando no esta afilada. Un hacha que no está afilada o esté mal afilada puede ser muy peligrosa, pues al perder el filo esta se embota y al estarse usando para cortar puede rebotar en una superficie haciendonos perder el control, y provocando que no hagamos daño o hagamos daño a otras personas. Un hacha siempre debe ser tan afilada como una navaja, por eso mismo no debemos prestársela a una persona que no sepa cómo usarla, quien además puede tener un accidente, derivado de una torpeza en su manejo.
Transporte del hacha:
Cuando pasemos el hacha a otra persona, debemos evitar lanzarla, pasando la de mano en mano, para eso la tomaremos del mango, cerca de la cabeza, en posición horizontal y con el filo hacia abajo dejando el extremo del mango libre para que lo tome la otra persona. Cuando no lo estemos usando no lo dejaremos clavado sino en su funda, el Hacha debe tener su propia funda, cuando la lleves sin su funda, puedes tomarla como se expresa en la imagen, pero la mejor forma es que la lleves con su funda y la tomes de la cabeza con el filo hacia atrás sin mecerla o darle vueltas.
Empezando a cortar:
Para cortar deberemos empezar revisando el terreno. Balancea suavemente el hacha tomando el mango del hacha completamente extendido sobre su cabeza en un arco de 360 ° de frente como también alrededor de nuestro cuerpo para asegurarse que no hay obstrucciones. Dependiendo la situación podremos optar por hacer esta revisión con la porción más larga del mango con respecto a la cabeza, o con la más próxima, esta última se utiliza para evitar lastimar a otra persona que por error.
Deberemos colocarnos a un lado del tronco o leño, asegúrandonos de tener una base firme. Tomaremos una postura amplia manteniendo el mango en paralelo al suelo prevenir lesiones en los pies. Algunas personas usan guantes cuando usan un hacha, algunos no. Los guantes son una buena idea para partir leña, donde se manipulan muchas piezas de madera astillada. Pero para cortar, usa tu juicio. Si los guantes de cuero protegen tus manos y ayudan a tener un buen agarre en el mango, úselos.
La técnica más popular para empezar a cortar con un hacha, es comenzar con un corte en ángulo de 45 grados en una dirección (Izquierda o derecha) para crear una muesca. Continúe cortando en ángulo de 45 grados, con cada corte en sentido contrario al anterios para crear una figura en forma de " V " dale la vuelta cuando estes en la mitad y corta la mitad del otro lado para terminar el corte. Estas dos muescas en "V" deben reunirse justo en el medio del tronco. Las ventajas de cortar dos muescas en V en un tronco en lugar de una muesca en V grande es simplemente una cuestión de facilidad. Cortar dos muescas en V más pequeñas es más fácil y lleva menos tiempo que cortar una muesca grande. La precisión es lo único que cuenta; la fuerza del swing no es tan importante como su colocación.
El error más común es hacer la muesca en "V" demasiado pequeña. Esto pellizca la mitad de la muesca en "V" antes de llegar al centro del tronco. Algunos expertos afirman que es un método ineficaz. En su lugar, deben cortar trozos de madera a través de trabajo metódico y progresivo en un área específica con el hacha, alterando un poco el ángulo para alentar a la madera a salir disparada debido al corte.
Aquí hay algunos consejos más sobre el trabajo con hacha:
- No corte directamente a través de un nudo (donde salía una rama en el tronco de un árbol), si puede cortar alrededor. Los nudos a menudo son muy duros y pueden astillar su hacha o filo.
- Nunca golpee el suelo con su hacha. Si usted necesita cortar raíces, use una herramienta de arranque como un Pulaski o un azadón.
- Nunca intente clavar una estaca o algo parecido con la cabeza del hacha, puede costarle un ojo.
- La cabeza del hacha es frágil a temperaturas extremadamente frías. Es probable que se astille a menos que sea calentada antes de usar. Una forma de calentar tu hacha es colocarla (enfundada claro) debajo de la axila, durante unos minutos o entre tus manos. Si no quieres compartir algo de tu calor corporal con tu hacha, corta muy lento durante al menos durante 2 minutos para calentar el hacha.
- Nunca debemos golpearla contra una piedra pues maltrataríamos el filo, debemos procurar no enterrarla, pues puede haber una piedra oculta y también porque la humedad la maltrata.
- Para mantener la elasticidad del mango debes frotarlo con aceite de linaza de vez en cuando.
- Si vas a guardar el hacha durante varios meses, es bueno engrasarla ligeramente y déjala en su funda (si no tienes una, envuélvela en papel periódico).